Mis amigos...

viernes, 4 de junio de 2010

Un cuento

Paula se levantó justo cuando escuchó arrancar el auto. Eso significaba que Esteban no volvería en unas cuantas horas y que los chicos tampoco estarían en la casa. Pensó en volver a acostarse, pero iba a ser inútil. No dejaría de pensar en Martín y lo que había sucedido la noche anterior. Caminó hasta la cocina. La casa estaba helada. Se preparó el mate, amargo, como todos los días. Le ayudaba a pensar, a decidir. Miró por la ventana. Amanecía y se escuchaba el canto de algunos pájaros. Pensó que Martín estaba en lo cierto: le había dicho que sería mejor para los dos alejarse un tiempo. Tal vez sí, tal vez no. Durante meses había sido la única persona que sabía lo que le pasaba. Quizás había sido demasiado para él. Quizás no debería haberle contado los problemas que tenía con su marido. Después de eso cuando chateaban, las conversaciones siempre giraban en torno a lo mismo, siempre terminaban hablando de Esteban...y habían dejado de divertirse.
Se preguntó en qué momento dejó de ser ella misma. Vino a su memoria el cachetazo que su padre le había dado cuando tenía cinco años y ella le preguntó por qué le había pegado a su mamá. Se dirigió hacia el escritorio y buscó papel y una lapicera.  El recuerdo ya no dolía. Se dió cuenta que tampoco le dolían los celos absurdos de su marido y tampoco su amenaza de matarla si se iba con otro. Tampoco le dolían sus contínuas aventuras con otras mujeres ni su avaricia. Cuando pensó en Martín sintió algo de ternura. Pero no le alcanzaba. Ella había querido conocerlo personalmente pero él no. Pensó en sus hijos adolescentes que ni siquiera la saludaban al llegar de la escuela...
Lentamente caminó de nuevo a la cocina. Se sentó en el lugar que ocupaba siempre en la mesa y escribió la carta. Al final, puso la leyenda "Para Esteban" y escribió en letra de imprenta la dirección de mail y la contraseña. Cada día había archivado allí sus conversaciones con Martín. Tomó la carta, salió al jardín y  la colocó en el buzón de la entrada. Esteban la vería al llegar.
Volvió a la cocina y cerró la puerta. Quiso tomar otro mate, pero ya no quedaba agua en el termo. Se levantó y abrió la puerta del horno. Dejó todas las llaves de gas abiertas y se sentó de nuevo a esperar. Pensó que hacía demasiado frío en esa casa...comenzó a sentirse mareada y justo antes de perder la conciencia, encendió el fósforo.

12 comentarios:

  1. Hola MB:
    Alguien dijo que no hay que creer todo lo que hay en la red.
    Pero es algo muy feo este cuento.
    Como un golpe bajo.
    Muy bajo.

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  2. Muy duro tu relato, tal vez demasiado pero real.

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  3. Ouch! duele, duele.
    no alcanzó una curita en el alma.

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  4. Que manera de crear una historia tan impactante en apenas unas lineas! Me encanta.

    Pero debió doler...

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  5. Crónicas, Malque, Implicada, Todavía:

    El cuento es pura ficción.
    Lo que sí forman parte de la realidad son los maltratos y abusos físicos y psicológicos que sufren muchas mujeres, de todas las edades y en todo el mundo...Siempre me pregunté porqué una mujer los soportaba...

    Saludos a todos!

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  6. Un cuento cruento.
    También llego tarde querida Maribe, pero yo por cuestiones laborales.
    Trágica decisión de la protagonista al ver consumida su esencia. Los abusadores son quienes deberían morir, pero es este un mundo torcido, tristemente.
    Cu{idate mucho, luego nos leemos.

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  7. Hola Pherro:
    Este mundo puede ser muy injusto...
    Gracias por pasar por mi blog.

    Un beso

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  8. Muy triste final, María Beatriz. Pensé que podría llegar alguien o darse alguna situación que mojara para siempre la mecha de los fósforos de la protagonista. Pero me equivoqué.
    Besos, amiga.

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  9. Hola Rudy:
    ¿Cuándo se quiebra el espíritu de una persona, perdiendo la esperanza y las ganas de vivir?

    Muchas veces el dolor de los demás nos pasa desapercibido...

    Gracias Rudy!
    Un beso
    Maribe

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  10. Muy bueno, lástima que aunque sea ficción, no sea sólo eso.

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  11. Es verdad, muchas mujeres reciben maltratos físicos y psicológicos hoy en día...
    Muchas gracias por tus palabras!

    Saludos

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  12. Cambié mi url,
    ahora estoy en:
    http://implicata.blogspot.com/

    saludos :)

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