Mis amigos...

lunes, 23 de septiembre de 2013

Dale vida a tu alma


En términos prácticos y reales, nos enfermamos cuando en lugar de expresar lo que sentimos, pensamos o deseamos, lo callamos y lo reprimimos. Cuando dejamos de lado nuestros deseos por cumplir expectativas de los demás. Cuando olvidamos nuestros sueños por cumplir la rutina aceptando vivir sin pasión la vida. De cierta forma, nos enfermamos, cuando vamos en contra de nosotros mismos.

Venimos de una sociedad que nos enseña a someternos, a callar, a vivir bajo un cartabón que no acepta nuevos caminos, que nos uniforma el alma, que nulifica nuestros corazones y crea una mente programada para pensar poco y obedecer mucho. Una sociedad que nos enseña que la enfermedad se cura con el doctor, a través de medicamentos que no permiten seguir “aguantando” las mismas circunstancias que nos enferman, como un anestésico que nos convierte en seres robotizados, desconectados de nosotros mismos.

Millones de personas, en la actualidad, consumen vitaminas, cafeína o bebidas energizantes para poder soportar largas horas de trabajo, desgaste y desvelos, llevando el cuerpo físico a extremos que después, nos pasarán factura ¿no se nos ocurre pensar que lo lógico y natural sería disminuir el desgaste, en lugar de obligarnos a dar más de lo que nuestro cuerpo puede? Escuchar nuestro cuerpo, dormir cuando estamos cansados, comer cuando tenemos hambre. Seguir nuestro ritmo, no el que nos obligan a seguir.

Las flores de Bach, la Aromaterapia o los masajes no están creados para ayudarnos a liberar tensiones hoy para mañana regresar a la vida que nos crea esta tensión. No son un anestésico más. Ni la depresión ni la ansiedad, se podrán liberar cuando estamos tomando decisiones equivocadas.

La sanación no es tan complicada, tiene que ver con regresar a lo esencial, aprender a escuchar nuestro cuerpo, basta con que nos sintonicemos con nosotros mismos y dejemos de darle prioridad al mundo exterior, para comenzar a priorizarnos nosotros, no a través del ego, sino a través del amor, eligiendo lo que hace vibrar al alma.

¿Ya tienes identificado lo que llena de vida a tu alma?






Por: Harumi Puertos

2 comentarios:

LinkWithin

Related Posts with Thumbnails